Ni del todo previsible, ni totalmente nuevo Arte y Moda nos sorprende en una metrópolis barroca, rítmica, llena de alegría y fuegos de artificio por sus quinientos años.
La Habana - ciudad que cuando cambia - sigue siendo antigua y moderna, es el escenario donde desfilan los trajes de luces: sugerentes, originales, efímeros. Diseños que buscan su coartada en la plástica contemporánea para alejarse de lo convencionalmente establecido.